Restaurante Al trapo: ¡¡A todo trapo!!

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Fecha: 24 noviembre, 2014

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Restaurante Al trapo

Dirección: Caballero de Gracia, 11 – Madrid
Teléfono: 915 242 305
Tipo de cocina: Cocina de autor

Con unas expectativas muy altas

Paco Morales en Altrapo
Oí hablar por primera vez de Paco Morales cuando lo de Bocairent y su periplo en el Hotel Ferrero que acababa de inaugurar el famoso tenista muy cerca de su localidad natal, Ontinyent. Me hablaron muy bien de sus platos, del excelente trato en sala, de un entorno encantador… Parece ser que llevaban razón. No en vano se logró una estrella Michelín al poco tiempo de abrir. Mientras buscaba la ocasión para acercarme, llegó la crisis y todo aquello se fue al traste. Desconozco en realidad si el hotel sigue abierto o no, pero lo que es cierto es que Paco tuvo que salir de la Comunidad Valenciana y perdimos, además del galardón, un cocinero con una proyección extraordinaria.

Volví a oír hablar nuevamente de él en una especie de documental en la televisión sobre la impresión 3D y su aplicación en la cocina, técnica que estaba desarrollando especialmente el chef cordobés. La curiosidad seguía en aumento. Y ésta se disparó hasta índices inquietantes cuando iba leyendo algunas valoraciones de restaurantes como Piñera o Al trapo en mis blogs de referencia, lugares en los que el cocinero estaba implicado de uno u otro modo. Esa noche otoñal crucé la puerta del local, por tanto, con muchas ganas e ilusión, pero también con el temor de quien visita un restaurante colmado de expectativas y luego éstas no se cumplen…

Trabajo en equipo en Altrapo con Paco Morales

Local de moda en Madrid

El restaurante está enclavado en los bajos del Hotel de las Letras en plena Gran Vía madrileña. Se trata de un local inmenso, diáfano, divido en dos espacios pero sin ningún tabique de separación: una primera estancia habilitada como cafetería, coctelería o zona de copas y la sala del restaurante propiamente dicha. Llegué el primero de mi grupo y me acomodé en la barra donde tomé un par de vermuts rojos mientras observaba el local.

De las cenas a las copas en Altrapo con Paco Morales

Para la decoración del sitio se ha apostado rotundamente por los colores claros. El parqué, las paredes y el mobiliario se encasillan claramente dentro de esta gama, mientras que las cortinas y algunos paneles de color rojo intenso rompen con esa línea monótona creando, en general, una atmósfera informal y muy actual. Mención especial para el proyecto de iluminación con flexos de pie en la zona de copas e infinidad de lámparas de péndulo y de una sola bombilla que cuelgan a diferentes alturas del techo en la sala del restaurante.

Sala diáfana de Altrapo con Paco Morales

Uno y otro espacio presentaban aquella noche un lleno absoluto. Público más bien joven, mesas con grupos, algunas parejas… gente dispuesta a pasarlo bien el sábado por la noche y de disfrutar de una propuesta gastronómica de calidad pero despojada de pompa y rimbombancia.

Menú “a ciegas”

Nuestros anfitriones en Madrid, Isaac y Fernando, dieron “carta blanca” al equipo formado por el propio Paco Morales y el jefe de cocina, Rafa Cordón. En la “sobremesa”  que disfrutamos después con ambos percibí que se trata de una pareja perfectamente ensamblada y que existe una gran complicidad entre ambos. Esto fue lo que nos ofrecieron:

Aireado de tortilla española con pimiento verde y anchoa. Fue el propio Paco Morales quien se pasó por nuestra mesa con una bandeja sobre la que descansaban estos snacks. Leves recuerdos a los cócteles de bienvenida tan típicos en los salones de bodas, antes de pasar a la mesa aunque aquí ya habíamos tomado asiento. Cada uno de nosotros lo tomó en su mano y lo llevó directamente a la boca. Bocado muy diferente, textura agradable y sabor intenso: ¡Acierto! Con un solo bocado Paco acababa de meterse a más de uno en el bolsillo.

Paco Morales nos sirvió personalmente varios platos en Altrapo

 

Crema de lentejas estofadas con canela, ñoquis de queso y nieve de foie: Se presenta una pequeña cazuelita de hierro colado ante cada comensal en la que ya se han dispuesto las bolitas de queso y el foie pulverizado. Ya en mesa, se sirve la crema del estofado que, por su temperatura, desintegra los demás ingredientes y, al mismo tiempo, los integra junto a ella. Desparecen como tal los sabores del queso y del foie pero la crema de lentejas gana un montón con los nuevos matices que éstos le aportan. Buen aperitivo.

Crema de lentejas estofadas con canela ñoquis de queso y nieve de foie Altrapo con Paco Morales

 

Bollo “preñao” de chorizo con huevo de codorniz, mousse de hongos y huevas de trucha: La interpretación de un clásico que llega en esta versión modernizada. Otro bocado de altura en el que se consigue domesticar el sabor del chorizo pero sin que éste quede falto de intensidad. Repetiría.

Bollo "preñao" de chorizo con huevo de codorníz mousse de hongos y huevas de trucha de Altrapo con Paco Morales

 

Croissant de centolla y mahonesa de Kimchi: Tal vez el aperitivo que, sin estar malo ni muchísimo menos, no transmitió en la mesa tan buenas vibraciones como sus predecesores. La apariencia del mismo es exactamente la de un croissant dulce. Mención especial merece la masa de éste que era realmente esponjosa y etérea. El relleno, sin embargo, algo falto de intensidad, de aquello que Alberto Chicote está poniendo tan de moda en su programa de TV: la falta de “punch”.

Croissant de centolla y mahonesa de Kimchi de Altrapo con Paco Morales

 

Tortilla de setas a mi manera: Curiosa presentación en el plato de vidrio “de toda la vida”. Para que nos entendamos, el de Duralex (permítaseme usar una marca comercial por una vez y sin que sirva de precedente). Plato tradicional con el toque personal del cocinero reflejado en el punto del huevo, muy poco cuajado. Rico.

Tortilla de setas a mi manera de Altrapo con Paco Morales

 

Chantarellas salteadas con fondo de carne y bechamel. Desconozco el proceso de elaboración de esta bechamel y los ingredientes usados pero el efecto que se produjo al revolverla con las setas me recordó mucho en textura y sabor al del huevo escalfado. Un plato muy otoñal, sencillo pero muy redondo.

Chantarellas salteadas con fondo de carne y bechamel de Altrapo con Paco Morales

 

Cocochas de merluza con patatas en salsa verde: Tal vez el plato menos sorprendente en cuanto a ingredientes usados, técnicas revolucionarias o presentaciones llamativas, pero uno de los más elegantes que salieron a la mesa y en dónde quedó patente la sabiduría del cocinero en cuanto a hondura de los platos, persistencia del sabor y respeto a la tradición. Ricas las cocochas y deliciosa la salsa verde con un punto de fluidez muy acertado y una acidez perfectamente controlada.

Cocochas de merluza con patatas en salsa verde de Altrapo con Paco Morales

 

Pichón asado son pasta udón, setas de primavera y salsa de ostras: Un plato de esos que “te tocan”. Dos de sus componentes tienen la culpa. Las porciones del pichón presentadas con un punto excelso, como jamás había probado, y un fondo preparado a conciencia con los entresijos del ave y las ostras del que destacaría su densidad y sabor. Alguien encuentra y comenta el punto de sal: un pelín subido. Es cierto. Está presente, pero para mí el plato lo requiere para compensar el sabor neutro del fideo y exaltar la carne del pichón. Bravo.

Pichón asado con pasta udón setas de primavera y salsa de ostras de Altrapo con Paco Morales

 

El rabo de toro guisado, cañadillas y ñoquis de polenta. Nuevamente destacaría el fondo por encima del resto de ingredientes (y llevamos tres en esta línea). Concentración suprema que no conlleva pesadez por el toque de la menta. La “cañailla” (o caracol de mar) no aporta emociones especiales al plato. Es un alimento, eso sí, que no solemos tomar y se agradece su presencia en él. Se echa de menos un punto menos terso en la carne que, sin haber quedado dura, no es de las tiernas que he probado.

El rabo de toro guisado cañadillas y ñoquis de polenta de Altrapo con Paco Morales

 

Frutos rojos con remolacha y regaliz: Un buen postre en el que se conjugan texturas y sabores contrastados con un resultado final en boca muy fresco. Se entremezclan todos los componentes en el plato, se toma una cucharada e inmediatamente una bocanada refrescante recorre todos los recovecos de la boca. Gran parte de culpa la tienen los pedacitos de “juanola” que coronan el plato. Un “lavado de dientes” sin levantarse de la mesa.

Frutos rojos con remolacha y regalíz de Altrapo con Paco Morales

 

Maíz cremoso y crujiente con mole poblano: nuevamente se construye sobre el juego de texturas diferentes. Ausencia cuasi total de sabores dulces, solo aquel que proviene del helado de maíz. Postre nada goloso que tal vez me hubiese gustado más de haberlo tomado antes que su predecesor. Comentamos a Paco y nos contesta que el otro se sirve antes para limpiar el paladar y marcar claramente la frontera entre los platos salados y los postres. Más sabiduría acumula él, por supuesto.

Maíz cremoso y crujiente con mole poblano de Altrapo con Paco Morales

 

Junto a este completo menú se sirvieron diferentes vinos: Fino La Panesa para acompañar los snacks, Botani Moscatel y Albariño Vanidade para la primera parte del menú y dos vinos tintos, Navaherreros y Dehesa de los Canónigos para los “platos fuertes”. Se acompañaron los postres con cava Extremarium Mont Marcal. En la mesa había personas mucho más ilustradas que yo en el mundo del vino y hubo coincidencia en la correcta elección de éstos.

 

Altrapo con Paco MoralesUn sitio del que difícilmente se puede salir descontento

Esa sería una de las muchas definiciones que me vienen a la cabeza para calificar este restaurante y que me gustaría usar como conclusión final del post. En Al trapo se come bien, recibes una buena atención y se está muy a gusto. Y, cuando uno sale de casa y se deja un dinerito en un restaurante, es eso lo que busca, ¿o no? Yo creo que sí.

¿Qué le pides tú a un Restaurante?

 

25 comentarios en “Restaurante Al trapo: ¡¡A todo trapo!!

    1. Toni Grimalt Post author

      Mejor siempre escribir con los recuerdos frescos. Lei sobre Altrapo en tu blog y tenía muchas ganas de visitarlo. La experiència no defraudó, más bien al contrario. Gracias por descubrirnos tantos lugares!

    1. Toni Grimalt Post author

      Con el comienzo espectcular del aireado de tortilla y La Panesa ya te ganaron desde el primer momento, Javier! Fue una muy buena cena y un ambiente muy distendido y divertido.

  1. Jon Ander

    Es que eso de comer bien, que te traten mejor aún y que salgas con una sensación de querer volver es lo más de lo más. Ya si tienes la suerte de ir en una estupenda compañía……. amén.
    Pues realmente tiene una pinta estupenda, tanto el local como los platos. Esas kokotxas en salsa verde tenían que estar para comerte el caldo con cuchara.
    Como siempre, estupendo trabajo y como siempre, una envidia poco sana de no poder “disfrutaros”.
    Un saludo.

    1. Toni Grimalt Post author

      La cocochas, el pichón, el rabo… Unos fondos muy “curraos”, de esos que sé que te satisfacen especialmente a ti, Jon. Ay si estuviese el AVE Euskadi-Madrid!!! Lo harías rentable, jajaja!

  2. craticuli

    Enhorabuena Toni, estas perfilando unos comentarios realmente interesantes, tanto por contenido como por continente.
    Yo conocí la cocina de Morales en el Hotel Ferrero, me pareció un cocinero elegante, limpio y sensible. Fue una pena que tuviese que salir de aquel lugar, el enclave estaba muy acorde con su estilo de cocina naturista de ciertos aires atávicos, y el restaurante era realmente precioso, ideal para disfrutar su talento con el requerido sosiego que merece.
    Quitando algún desliz, recuerdo platos magistrales, como la menestra, un nacarado rape, o un postre especiado con mil y un matices. Aquí lo plasme: http://www.verema.com/restaurantes/43798-hotel-ferrero-bocairente/valoraciones/973192-druida
    Veremos que depara su incursión cordobesa.
    Un saludo.

    1. Toni Grimalt Post author

      Gracias por leernos, Carlos. He leído tu comentario del Ferrero en Verema (en su día no recuerdo haberlo hecho) y me ha parecido magistral. En Al Trapo se ofrece una cocina mucho menos pretenciosa y cabe recordar que aquí Morales está como asesor, no como cocinero. Aún así, se vislumbran trazos o fundamentos comunes entre lo narrado por ti y lo que yo percibí. Un lugar a tener en cuenta si visitas Madrid, eso sí.

  3. José Ruiz

    Estupendo relato de lo allí acontecido, ¡enhorabuena!
    También para mi el plato de la noche (y que espero quede para el recuerdo) fue el pichón con udón. Es de esos platos que todos luego comentamos. Lo que no entendí y no me gustó, fue el segundo postre, tal vez soy demasiado goloso para que me guste un postre nada dulce.
    A pesar de la disposición en forma de U muy abierta, resultó una cena divertida y muy cómplice en la que todos, creo que sin excepción, disfrutamos a pesar de que las fuerzas no andaban sobradas.
    Un abrazo.

    1. Toni Grimalt Post author

      Pues así es, José. Tal como lo dices: plato para el recuerdo y buenos momentos vividos a pesar del “meneo” que le estábamos metiendo al cuerpo ese finde. Como persona que acumula más experiencia en el aspecto del vino, ¿qué te pareció lo que nos ofrecieron? Sé que vas a hablar muy bien de La Panesa, pero… ¿el resto?

      1. José Ruiz

        Sin duda La Panesa es uno de los grandes finos, su crianza de 15 años bajo flor y los aromas salinos y almendrados (turrón) que desarrolla, lo hacen uno de mis preferidos.
        Me gustó el Botani de aromas auvados propios de la moscatel que contrastan con la entrada seca en boca, la frescura de Vanidade, aunque particularmente los albariños me gustan algo más maduros.
        Cada vez me gustán más las garnachas de corte atlántico, la acidez, frescura y facilidad de trago de Navaherros me parecerieron muy adecuadas. Dehesa de los Canónigos, es un vino que no está mal, pero personalmente no me entusiasma.
        En contra de lo que siempre digo que los cavas no son para el postre, en este caso dado la particularidad de los mismos hacían que aromonizara adecuadamente.

  4. Ana Juan

    Mi sensación global es de haber disfrutado de la velada como un todo. Me gustó el ambiente, el ritmo, el trato desenfadado… mi predisposición era total pero alguno de los platos no me llegaron. Como excepción, las cocochas (¡manda agallas!) cuya salsa con vino ácido me resultó muy curiosa y refrescante… también el bocado inicial o el bollo preñao.
    ¡Buen rollo! es mi conclusión
    Un abrazo compañero !

    1. Toni Grimalt Post author

      Pues mi predisposición no era 100% (ya llevábamos horas “jartando” por los madriles), pero me vine arriba con los platos degustados, el buen ambiente y el ritmo de los platos. Coincido con los platos que has enumerado y alguno más. Ese pichón, tú ya sabes…

      Otro abrazo para tí

  5. Ada

    Estupendo comentario, Toni. Muchas gracias por relatarlo tan bien y detalladamente porque con tanto comer yo ya confundo todo el festín.
    Las fotos me encantan, esa cuadrilla de cocineros no tiene nombre. Frescura, mucha frescura!
    A seguir, amigo 😉

    1. Toni Grimalt Post author

      Muchas gracias, Ada. Las fotos son de Ana, la mejor reportera del blog, ya sabes. El trato por parte del equipo de Al trapo y el ritmo impuesto por Paco y el personal de cocina fue fantástico. Un abrazo!

  6. Fernando Gil

    Excelente post, como siempre, mejorando el nivel. Muy de acuerdo con todos vosotros, sobre todo en los comentarios de la cena como conjunto, el ritmo, el trato… Son una serie de aspectos que destacan cuando el equipo rebosa profesionalidad. Para cuando otra en Madrid ??? Que me pongo a prepararla de inmediato !!!

    1. Toni Grimalt Post author

      También en esa sentada me caíste cerca y sé que lo pasaste de miedo, especialmente con Javier. Muchas gracias por leernos y seguirnos tan de cerca. Un abrazo!

  7. Aurelio G-M.

    Sí jeje, tú estabas muy muy concentrado diseccionando los platos bocado a bocado, con un exhaustivo análisis técnico de los mismos…

    Eres un crack, te tenía que haber grabado: bocado, degustación serena, frugal buchito de vino, cara seria, de circunstancias… y gran prudencia en los juicios contenidos y en las comedidas sentencias….

    jajaja

    1. Toni Grimalt Post author

      Claro, claro… Como toca estar. Y mira que era difícil con la algarabía que estabais montando los de la derecha. Pero bueno, uno tiene sus técnicas para concentrarse y abstraerse de todo cuanto le rodea.

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