Escrito por: Ana Juan
Fecha: 30 julio, 2014
Restaurante L’Almàsera
Dirección: Cl Abadia, 20 C.P.: 03828 Margarida – Planes
Teléfonos: 965 51 43 14 y 699 46 81 95
Tipo de cocina: de mercado, con guiños al recetario local
Precio de la experiencia: 28.50 € por persona
Ya llegó el verano a la Montaña de Alicante
Aunque ha tardado, el verano de chicharras, aroma a paja seca y sol de justicia ya está en el Levante. Pero hemos tenido suerte y en Margarida (junto a Planes de la Baronía) corre el aire hoy.
Estos pueblos merecen una y mil visitas, en todas las épocas de año. También en verano te puedes acercar para dar un paseo bien temprano, comer y acabar la tarde viendo la puesta de sol desde la torre de Almudaina.
Esta construcción del siglo XIII, de la época islámica medieval, ha sido resturada con respeto para su conservación y exhibición. Forma parte de la ruta del MARQ (Museo Arqueológico de Alicante). Si la visitas aprendes algo de historia de nuestros pueblos agrícolas y de cómo hacían las obras en esas fechas. A la postre te regala unas vastas vistas del valle, precioso, apacible.
Este Restaurante es especial
Los habituales venimos de nuevo a disfrutar de la cocina de Michael, junto con nuestros amigos Nico y Esther: “Os va a gustar L’Almàsera”… y les gustó ¿Cómo no?
Es un lugar especial, regentado por alguien especial que te prepara una comida especial… ¿Qué tiene de distinta? Pues que con lo que da la tierra más cercana, con el más natural producto local, Michael prepara platos con toques de otros lugares (en ocasiones de su Alemania natal y a veces algo más oriental).
Así te encuentras con el “Menú Margarida” a medio día de “cositas fresquitas”, como él mismo describe en su carta. Por 12 € Una crema fría, una ensalada a compartir, un par de cocas de espelta y postre casero. Las bebidas aparte. Por la noche sirve a la carta, breve pero buenas propuestas que quizá te dicen menos al leerlas que cuando las pruebas. Comprende entrantes y platos principales de carne o pescado del día (estamos cerca de Denia, por el paso entre montañas).
Esta presentación de su oferta es nueva para nosotros, en anteriores ocasiones funcionaba con distintos menús, tal y como contó Jose en su post de Restaurante L’Almàsera de Margarida.
Vinos básicos pero bien elegidos
La carta de vinos es corta, con referencias básicas pero bien elegidas, huyendo de las opciones más clásicas. El recargo en el precio de los vinos es un pelín alto, no obstante su inmejorable RCP en el apartado de la comida, equilibra la cuenta final. Las copas de calidad. El servicio se limita a la presentación, prueba y primer relleno, para mí suficiente.
El menú y algo más
Como queremos mostrar a nuestros amigos algo más, pedimos un par de aperitivos extra y esto es lo que resultó:
Salchichas con col lombarda adobada, cebolla caramelizada y yogur, sobre medio panecillo tierno. Primer entrante sorprendente, más si lo comes que si lo ves… Este hombre hace las cosas sencillas muy deliciosas, son sus aliños, sus adobos, sus combinaciones…
Montadito de lomo sobre patata asada, con un suave ajo aceite y pasas. Nuevamente un bocado (o tres).
Empieza el menú Margarida con la crema fría, a elegir entre gazpacho, o la crema de melón con pepino y yogur. Esta última es la que yo elegí y quedé tan encantada que ya la he preparado el fin de semana en casa. Fresca preparación que con el pepino diluye la dulzor del melón y con el yogur obtiene cremosidad y ese punto de acidez (mínimo pero adecuado). Lo presentó en vasito con un cohombro ensartado en banderilla. Todos al unísono: buenísima.
Sigue una ensalada normal… normal si no fuera por el aliño, con mezcla de aceite local, distintos vinagres, sal, azúcar y algo más (jejeje). Apetece tanto en esta época…
Como principal, las cocas de espelta a elegir dos de entre la de pescado (atún fresco), carne o verduras. Insisto, algo tan sencillo y tan rico… La base de espelta crujiente, compacta pero sin estar apelmazada. Las verduras pochaditas acompañando la proteína principal, el atún o el lomo.
Por último llegó el postre: una coca de almendra esponjosa, con inyección abundante de un buen chocolate cremoso (¡madre mía! escribo esto antes de cenar y estoy salivando…), acompañado de helado de vainilla, una bolita de helado envuelta en capa crujiente de choco y una cereza de 2013 macerada en licor y bañada en chocolate también (¿Mon Chèri?).
Un vino especial por mi onomástica
Empezamos bebiendo unas cervezas friiiassssss. Seguimos con un refrescante cava brut rosado Carlota Suria de Pago de Tharsys. Luego un sencillo, pero cumplidor, godello Neno y rematamos con un discreto tinto Habla de la Tierra.
Contamos con la anuencia de Michael para traer un vino que nos apetecía compartir en el día de mi santo. Del viaje a Francia nos trajimos un dulce muy especial: Moelleux 2009 de Domaine du Clos Naudin de la Appellation Vouvray. Foreau es uno de los elaboradores de referencia en el Loira, un maestro de la Chenin Blanc.
Comparto aquí la cata del moelleux que me pasa Jose
Dorado, límpido y brillante.
Nariz de notable intensidad en la que predominan los aromas de frutas de hueso, notas cítricas y apuntes florales. Todo ello sobre un fondo mineral.
En boca presenta un tremendo equilibrio entre su patente acidez y el dulzor residual. Largo y persistente.
Sobremesa en la terraza
Luego salimos a la terraza a “estar”. Y allí estuvimos un buen rato, disfrutando de la agradable brisa, de las vistas al valle, de unos gin-tonics y de la compañía.
Si te apetece una escapada a la montaña de Alicante, puedes hospedarte en la casa y disfrutar de la atención y la comida de Michael.
¿Conoces los pueblos de la Montaña de Alicante?
Tuvimos la oportunidad de comer un día de semana en este restaurante, y nos encantó, calidad-precio insuperable. Da gusto explorar el interior de Alicante y encontrarte con sitios como este.
Cierto indira, poca gente ha sabido reconocer como vosotros el encanto de nuestra tierra. Gracias
Genial relato de un día inolvidable.
Un maridaje de vinos inesperadamente espectacular, lo digo por la corta pero bien seleccionada carta. Vuestra aportación del Clos Naudin más que oportuna…
¿Cuándo repetimos?
Inolvidable también por tu empeño en mostrarnos la torre de Almudaina… ¡valió a pena!
Tú sabes que siempre repetimos..
Un beso
Chicos!! Qué experiencia más xula! Yo también quierooooo!!
Tiene todo una pinta estupenda, y es que esas fotos… No sé que me gusta más si la puesta de sol o la foto. Preciosa chicos! Os veo muy puestos como modelos ;-)))
Besos calurosos y con chicharras a tope
P.D.: No me puedo creer que llegue la primera a este post con mi ritmo de tortuga, jejeje!
Gracias Ada!
Si es que hoy has cogido carrerilla y las liebres están de vacaciones…jajaja
Esto lo tienes cerca, así que a planificar una visita…
Un besote
El aliño de una ensalada es su verdadera “alma”. Por muy buenos ingredientes que lleve si está mal aliñada….. y viceversa. ¿Se ha perdido la foto del postre? Con lo que a mi me gustan…..
Hay gente que vive bien, hay gente que vive… muy bien y luego ya estáis vosotros. 🙂
Un abrazo.
No se te escapa una!… el postre estaba muy bueno y bien presentado pero la foto no era acertada…
De vivir bien sabemos todos un poco, eh?
Un abrazo Jon
Y yo que creía que Alicante era sol y playa….. mira que soy cateto!!!
Hay más que costa en esta terreta… La cuestión es que los alicantinos de la playa nos llaman a nosotros Pueblos de la Montaña (y a mucha honra).
¿os venís?
Un abrazo
Vaig visitar l’Almàssera “per culpa” vostra i vaig quedar encantant. Complementaria el viatge estiuenc a Margarida amb uns banys en els Tolls del barranc de l’Encantà. No sé si aquest estiu tindran aigua amb aquesta maleïda sequera pero es tot un planasso!
Buen plan Toni. Pero, si no hubiese agua, siempre quedará la piscina municipal (casi familiar) justo en frente del restaurante.
Un abrazo
Este equipo “colorao”, no para. Un saludo desde La Montaña, ahora denominada Cantabria, a los montañeses de Alicante.
Qué entradilla más evocadora y regresivamente estival!
Y qué afotico más maja! Ahora lleváis un tercer fotógrafo en el equipo Vinowine? Jo, cómo sois!
Ojo, que en Vinowine disparan con bala!
😉
La foto es de José Enrique, preciosa ¿verdad?
Un abrazo
Espectacular!
Pues a mi lo que mas me ha gustado, sin desmerecer la comida, es la foto de portada, muy chula.
Un abrazo.
Gracias Carlos, a Jose Enrique debemos esta chulada… y a los modelos jejeje
Un abrazo
Pues sí ya veo que para cuatro, voy a tener que leerlo todo antes de comentar, zorionak, vamos felicidades.
Éramos 6 adultos y la niña no bebía, claro está…. 😉